El logotipo del Museo se basa en la flecha amarilla que recorre todo el Camino de Santiago y orienta a los peregrinos hasta su destino. En este caso, la línea amarilla se curva para acoger distintas imágenes o textos que guían al visitante del Museo
El diseño de la gráfica planteado se unía intrínsecamente a la propuesta arquitectónica de la museografía, no sólo en los materiales sino en la disposición, destacando una pieza de cada Unidad Temática que queda incorporada a la gráfica y a las mesas-vitrina.