Reforma integral llevada a cabo por Gestión de Diseño en un piso de la madrileña calle Alcalá. De un concepto de vivienda de familia de los años 50-60 del siglo pasado, a un entorno actual sin perder el espíritu acogedor. De los tonos oscuros y espacios pequeños y recargados, se ha realizado una propuesta más diáfana, donde la luz natural y la iluminación artificial generan un ámbito agradable y cálido, basada en tonos blancos y maderas. Se ha apostado por la calidad de los materiales, tanto en los suelos como en los alicatados de cocina y baños. Se ha optimizado la distribución espacial de manera que ha salido un cuarto de baño más, así como una cocina más grande. El pequeño balcón-terraza permite una salida al aire libre madrileño.